ARREIT-CAPITULO II Sispilácopa

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...Iniciando Grabación...
Es el año 2025, las mujeres enloquecieron de poder. Ellas lo tenían todo, eran las dueñas del mundo; hasta que un grupo de hombres nos organizáramos para rebelarnos contra ellas, estábamos cansados, no nos sentíamos bien yendo de “Shopping”, necesitábamos hacer otro tipo de actividades, algo más...mmm...no sé cómo se llama eso, creo que se dice...masculino.
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Tuve que detener la grabación por un momento; un grupo de mujer-bots de caza andaba cerca, y no queríamos arriesgarnos a que nos hallaran. Hablando de eso, las mujer-bots, máquinas creadas para encontrar y si es necesario exterminar a los hombre rebeldes. Fueron las mujeres quienes las hicieron, ellas se dieron cuenta de que necesitaban seres encargados de las labores del hogar, intentaron crear robots que las cumplieran, pero no obtuvieron los mismos resultados que como si fuéramos nosotros (las mujeres no conocían el antiguo arte de las labores hogareñas).
Ahora mismo me encuentro con varios hombres en búsqueda de una nave que las mujeres habían construido, la cual sería nuestro boleto de salida de este maldito planeta. Y ahora que lo pienso, voy a tomarme la libertad de decir esto: Sartra se equivocó.
En lo que ha transcurrido de nuestra búsqueda, nos encontramos con una extraña caja, en ella había una especie de armadura, así que la llevamos con nosotros por si nos sirve de algo.
Nuestro viaje se ha hecho largo, pero esperamos que valga la pena, al menos no nos hemos topado con varios peligros; lo más difícil fue escabullirnos sin que nos vieran, las mujeres nos tenían muy vigilados.
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Ya han pasado dos horas de búsqueda, que bueno que no hablé durante ese lapso porque si lo hubiera hecho, este capítulo se tornaría más aburrido. Lo bueno es que ya hemos llegado a la base lunar de las mujeres del barrio, no es que sea lunar, es que ahí es donde se hacen experimentos con hombres, investigan los efectos que pueden tener los hombre en la luna y otro tipo de cosas; pero para eso venimos, para enfrentar el acoso.
Estamos entrando, al parecer no hay problema... ¡OH no!, una alarma está sonando (wiwiwiwiwiwiwiw), y un grupo de mujer-bots se acerca.... ¡Corran! Entren ahí, rápido. Bien, creo que en este lugar estaremos a salvo, esperen ¿Dónde está Wincher?, voy a asomarme... está afuera, ¡Wincher!. Las mujer-bots lo agarraron, ¡NOOOOO, Wincheeeer!.
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Tuvieron que sujetarme porque iba a salir corriendo para salvar a Wincher, también me empezaron a golpear porque me agarró la “chiripiorca”. Y ahora que me doy cuenta, faltan más hombres, Wincher no fue el único al que se llevaron, también raptaron a Jankey, Estupidín y a Frodo. Pero Frodo no importa, siempre ahí cuidando su anillito, parecía jodido de la jupa, además, le falta más de la mitad para ser hombre, ¡Aah! ¿Entendieron? Más de la mitad porque es todo chiquitillo, ay que bueno.... chistín chistín.
No nos íbamos a quedar con los brazos cruzados, así fuimos a buscar a nuestros compañeros, emprendimos una misión de rescate. Nos metimos por los ductos de aire y empezamos a buscar la habitación donde se encontraban ellos. Vimos un tipo de calabozo profundo, y ahí estaban, excepto Frodo.... ah no si, ahí está, es que es tan pequeño que no lo veía, sólo se veía un balincillo, pero era él. Abrimos una escotilla para poder llegar a ellos, luego Toronbolo les gritó: “No te preocupes Shrek, venimos a salvarte”; no sé porqué dijo eso, pero qué importa, lo que si era cierto es que los íbamos a salvar.
El calabozo estaba formado por tres pisos de rejas; descendimos al que estaba más arriba, pero se nos apareció un mounstro extraño, nos dijo que se llamaba PuiPui, y que si queríamos pasar al piso central, debíamos derrotarlo, pero que no sería fácil porque él es el más rápido del universo... este es el clásico enemigo que dice ser muy galleta, pero que se puede vencer con cualquier cochinada. En ese momento, apareció de la nada Buzz Lightyear del comando estelar, dijo que él se encargaría de ese tipo, que nosotros siguiéramos adelante, luego se empezó a echar un discurso del comando estelar, pero nos fuimos antes de que nos matara de aburrimiento, lo único que vi antes de seguir, es que PuiPui lo empezó a agarrar a golpe limpio.
Llegamos al nivel central, bueno, piso central; aquí todo se observaba más calmado, pero noooo, ¡Por Diosa! obvio que esa tranquilidad no duraría mucho, por favor, esta es una de esas historias en las que hay que pelear antes de salvar a alguien. Esta vez, nuestro enemigo era nada más y nada menos que Pucca, digo, Koopa. ¡O.M.G! (Oh My Goddess), de verdad que las mujeres estaban locas, ¿Cómo se les ocurre meter a es bicho aquí?, como sea, de seguro también debíamos derrotarlo. Pero que era eso que apareció, ¡OH!, era Super Mario Baracus, venía a ayudarnos; antes de empezar la pelea, lo único que dijo fue: “JuJú, It’s Me, Mario Baracus”. No le entendí ni una mierda, pero nosotros nos preocuparnos por seguir adelante.
Finalmente bajamos hasta el piso donde estaban nuestros amigos, pero también estaban tres muchachos de apellido Jonas, aparentemente eran hermanos, pero no les dijimos nada porque parecían del otro bando, tenían cruzados los cablecitos, sólo pensaban en mariposillas....pobrecitos. Pero bueno, ya estábamos completos, excepto Frodo, al parecer decidió unirse a las hermanitas, digo, a esos hermanos. Salimos por una puerta que estaba abierta y que decía “salida”; ahora nos dirigíamos hacia la nave. Nos encontramos con una doña-bot, pero esta es indefensa, sólo le preguntamos que cómo se hacía para llegar a la zona de despegue, donde estaban todas las naves. Nos dijo que teníamos que subir una subida y luego bajar una bajada, y eso hicimos, ella no dijo cual subida y cual bajada, pero igual sirvió.
Ahí nos encontrábamos, frente a la mejor nave de todas, y la única que nos podía sacar de ahí, ya que las demás eran de juguete (las mujeres se dejaron lo mejor). Abordamos abordo, por suerte Estupidín sabía volar este tipo de vehículos (y yo pensé que de verdad era estúpido), porque si no, toda la búsqueda hubiera sido en ano, digo, en vano. Empezó el despegue, pero no hicimos cuenta regresiva; avanzábamos hacia el espacio exterior, Arreit ya se podía ver desde lejos, ese maldito planeta al que nuca volveremos, aunque me preocupo por los hombres que quedaron ahí.
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Ya han pasado dos años desde el viaje, y me sorprende que ésta grabadora aún sirva (seguro porque es marca Cony). Actualmente estamos en un planeta que presenta condiciones parecidas a las de Arreit, sólo que este se llama Tierra. Hace poco me encontré un calendario de bolsillo, en el cual venía una criatura muy atractiva, con eso me mastur....bueno, eso no importa, lo que noté en el almanaque es que aquí era el año 1820, eso significa que Arreit fue creado primero...mmm... extraño. Ahora que recuerdo, la armadura que habíamos encontrado no sirvió para nada, así que la dejé por ahí.
Bueno, hasta aquí voy a grabar, mi nombre es Capitulín, y aquí es donde digo: “Game Over”.